Ingredientes:
- 2 pechugas de pollo, cortadas en dados
- 250g (aproximadamente 9 oz) de pasta (penne, fusilli o cualquier forma que prefieras)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 cebolla, finamente picada
- 1 pimiento rojo, cortado en dados
- 200g (aproximadamente 7 oz) de champiñones, rebanados
- 1 taza de caldo de pollo
- 1 taza de crema de leche
- 1/2 taza de queso parmesano rallado
- Sal y pimienta al gusto
- Perejil fresco picado (para decorar)
Instrucciones:
Cocina la pasta según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Escurre y reserva.
Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Agrega los dados de pechuga de pollo y sazona con sal y pimienta. Cocina hasta que el pollo ya no esté rosado y comience a dorarse, unos 5-6 minutos. Retira el pollo de la sartén y reserva.
En la misma sartén, agrega un poco más de aceite de oliva si es necesario. Sofríe el ajo picado y la cebolla picada hasta que estén suaves y fragantes, unos 2-3 minutos.
Agrega el pimiento rojo cortado en dados y los champiñones rebanados a la sartén. Cocina hasta que las verduras estén tiernas, unos 5 minutos.
Vierte el caldo de pollo y lleva a fuego lento, raspando los trozos dorados del fondo de la sartén.
Agrega la crema de leche y el queso parmesano rallado a la sartén. Deja que la salsa hierva a fuego lento durante unos minutos hasta que espese ligeramente.
Agrega el pollo cocido nuevamente a la sartén, junto con la pasta cocida. Mezcla todo hasta que el pollo y la pasta estén cubiertos uniformemente con la salsa cremosa.
Prueba y ajusta la sazón con sal y pimienta si es necesario.
Sirve la pasta de pollo cremosa caliente, decorada con perejil fresco picado.
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